LA PREHISTORIA EN LAS PAJANOSAS - GUILLENA

Parque Natural "La Zaurdilla" en Las Pajanosas (foto Emilio José)

Que Las Pajanosas es tierra muy antigua, lo sabemos porque formamos parte de la antigua Vía de la Plata, que unía el Sur Occidental con el Norte penínsular hasta Finisterre, que los romanos convirtieron en calzada de comunicación y los cristianos en camino de peregrinación.

Los que vivimos aquí y caminamos por senderos, veredas y caminos de los alrededores, sabemos que es mucho más antigua que ese camino natural de unión entre el Norte y el Sur de la Península Ibérica, porque encontramos conchas y restos de animales marinos, que nos hacen

Concha marina en la via Verde de Las Pajanosas al Garrobo (Foto Emilio José)

 pensar que hace millones de años estas tierras estuvieron inundadas por el mar (concretamente hace más de cinco millones de años), de hecho un vecino encontró en su parcela hueso de una ballena.
Pero más desconocido para la población de Guillena y sus pedanías, Torre de la Reina y Las Pajanosas, es que en su entorno existen varios monumentos megalitos de gran importancia arqueológica y cultural, que datan del 2.500 al 3.000 A.C aproximadamente, estamos hablando de cuatro a cinco mil años de antigüedad, es decir para dejarlo claro, las primeras manifestaciones culturales, religiosas y arquitectónicas de nuestro más antiguos antepasados y no olvidemos  que «la primera civilización europea occidental es la Megalítica, que se situó en la zona de Andalucía dando lugar posteriormente a la cultura Tartesia».
(José Ruiz Mata)

Plano de situación de los dólmenes en el norte del termino municipal de Guillena entre el Palacio de Parladé y el cortijo Casa Canillas

Conservar las raíces de nuestro patrimonio cultural y arqueológico, es de suma importancia, pues constituye para nuestra memoria colectiva una parte importante de la identidad de nuestro pueblo, por eso la importancia de
conocerlo y conservarlo, sobre todo frente a las agresiones del mal entendido progreso y de lo que tal vez sea más peligroso: el olvido de nuestra propias gente, por conocer su más antiguo pasado.

Estoy convencido de que merece la pena, tener en cuenta el patrimonio Arqueológico de la Prehistoria de Guillena, pero ¿hoy en día, tiene de verdad interés, cuando tenemos que resolver tantos problemas vitales?, que no quepa la menor duda de la importancia de nuestra Prehistoria, pues no existe pueblo sin raíces y...
Andalucía tiene raíces tanto y tan antiguas, que nos permite sentirnos orgullos ante otras comunidades que usan y ostentan con frivolidad, la ya gastada frase de “Comunidad Histórica”.

Los dólmenes que se encuentran en el término municipal de Guillena como antiguos tesoros, esperan nuestra visita y respeto, por el saber de sus constructores y que como testigos mudos de sus conocimientos nos están esperando, desde preciosos lugares de la geografía Guillenera, para que los conozcamos y le prestemos el interés que merecen, como las antiguas manifestaciones de Arte, arquitectura y religión de los primeros pobladores de estas tierras, de los que podemos sentirnos orgullosos.

Un sentimiento que ha calado hondo en otras regiones de España, Europa (Portugal y Francia) y que los han puesto en valor mejorando su entorno, su accesibilidad y conocimiento, convirtiéndolos de esa manera en otro foco de atracción turística, como valor añadido a las ofertas turísticas de estos lugares y en ocasiones como el mejor y mayor reclamo para el “turismo cultural” y rural, que crece por toda Europa.

En Guillena tenemos, que sepamos (¡pues puede haber más por descubrir!) el Dólmen de las Canteras y el Dólmen del Puerto de los Entierros, que deberían formar parte de la oferta turística en cultura megalítica de Andalucía y solo necesita que los propios  vecinos de Guillena, Sevilla y Andalucía, la conozcamos, la respetemos y sepamos, como otros lo hacen en otra regiones como Galicia, Cataluña, Extremadura, etc.… ofrecerlas a los futuros visitantes, dentro del paquete cultural de zona rural y Ruta del Agua.

DÓLMEN PUERTO DE LOS ENTIERROS - GUILLENA

En los tiempos que vivimos, con la gran disposición de medios de comunicación, prensa, radio, televisión, el aumento del llamado turismo de interior y la facilidad de movimientos de las personas, hacen impensable, lugares desconocidos para los ciudadanos, pues hasta el más pequeño de los pueblos de nuestra región, tiene la posibilidad de ofrecer sus encantos turísticos a los posibles visitantes uniendo sus esfuerzos a otros pueblos de la misma comarca  y contando con la ayuda de las instituciones y usando si cabe, la misma red de redes que conocemos como Internet para llegar a cualquier rincón de la Tierra.   
Emilio José Pérez